En la ultima reunión del Laboratorio de Procomún el pasado miercoles 2 de abril se trató de pensar, a partir de un texto de Antonio Lafuente titulado «laboratorio sin muros», cómo podría evolucionar el seminario hacia una segunda etapa. Según entendí, el grupo está tratando de pasar de una estructura cerrada y poco formal de trabajo a una estructura más abierta pero con prácticas formalizadas. La nueva dinámica se plantea ahora como un laboratorio sin fronteras que pretende poner a prueba en diferentes ámbitos las reflexiones teóricas que se han hecho acerca de lo que pueda ser o no ser un procomún. Estos ámbitos tienen que ser ante todo comunidades de afectados y por ello se trata de hacerlas visibles a ellas y que, a su vez, las comunidades muestren cúales «objetos» o bienes pueden ser candidatos a ser denominados procomunes. Lo interesante de esta nueva etapa es que se pone a trabajar el concepto de procomún en la esfera pública. Este trabajo conlleva un efecto de doble via por el que el concepto modifica esa esfera y, a su vez, ésta lo modifica, y así debe de ser; pues sino, la noción operativa de procomún que se ha tratado de dilucidar, tomaría un sesgo ideológico como comentó alguno de los participantes.La estructura de «laboratorio abierto» que propone Antonio Lafuente adqiere su carácter formal al establecer un protocolo de procedimiento. Este se centra en crear un grupo o nucleo fuerte que jalone esta nueva etapa, un programa de trabajo y oferta pública de proyectos, para los cuales se seleccionaría o reclutaría colaboradores de las líneas de trabajos que esos mismos proyectos propongan. Conectar con otros colectivos y vincularse a otras organizaciones parecidas en aras de crear una red que potencie el contacto con las comunidades de afectados. Y finalmente, la estructura formal concreta sus resultados con la elaboración de «documentos constrastados».
En las próximas sesisiones de trabajo del Laboratorio del Procomún será interesante ver, en las diferentes propuestas de proyectos, cómo conciben cada uno de los proponentes de qué manera puede ser operativa la noción de procomún, en qué ámbitos y cúales podrían ser esas comunidades de afectados y, por su puesto, qué bienes o procomunes están en juego, ya que el espectro de posibilidades es bastante amplio. Pero precisamente de eso se trata, de poner a trabajar los conceptos. Alex.
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